Fruto globoso, amarillo y muy sabroso. Piel más o menos anaranjada, teñida de rojo en la parte expuesta al sol, recubierta de una finísima pubescencia y con un surco muy marcado, que se extiende del pedúnculo a la parte opuesta.
Pulpa más o menos adherida al hueso, más o menos jugosa y perfumada, tiene cierta textura fibrosa y consistencia harinosa cuando el albaricoque está maduro.
El producto se confecciona a granel, en cestas o alveolo en envases de cartón, plástico, o envases retornables.